La agricultura biodinámica
Aporta vitalidad a la tierra, a la planta y al fruto que nos da, que más tarde se convertirá en nuestra fuente de vida.
La Biodinámica es un enfoque holístico de la agricultura en la cual la vitalidad de la planta es la prioridad. En biodinámica los cultivos se consideran como un organismo en el que las plantas, los animales y los seres humanos están integrados, formando un todo y ayudándose mutuamente a crecer más fuertes y más vitales.
La biodinámica tiene su origen en las conferencias impartidas por Rudolf Steiner en 1924 y se fundamenta en 5 pilares.
Fomentar la biodiversidad en el ecosistema
La diversidad de especies, vegetales y animales, es un factor clave para determinar el nivel de salud y calidad del suelo, y del fruto que nos puede dar. A través de la agricultura biodinámica creamos oportunidades para que la naturaleza por sí misma, establezca un equilibrio en el suelo, fomentando y apoyando la biodiversidad que hay.
Trabajar siguiendo el ritmo de la naturaleza y el cosmos
En la agricultura biodinámica se trabaja con las energías vitales en la naturaleza y no solamente con las necesidades materiales. Por eso es tan importante la consideración de los ritmos cósmicos en el cultivo de vegetales.
Consciencia y amor por la tierra
Para nosotros la conexión con la tierra es crucial. Es por ello que cultivamos nuestros viñedos con agricultura biodinámica. Nuestro propósito es simple, fortalecer el equilibrio y la biodiversidad del suelo y de nuestro entorno a través de nuestras propias acciones en el viñedo. Sin uso de herbicidas ni pesticidas.
Aplicación de los preparados biodinámicos
Los preparados biodinámicos se componen de dos partes: la vegetal y la animal.
La idea del propulsor de la biodinámica, Rudolf Steiner, es que las fuerzas en las plantas y en los órganos de los animales pueden combinarse de tal modo que la naturaleza puede mejorarse, sanarse y apoyarse entre sí durante el transcurso del año.
Observación del viñedo e interpretación de sus necesidades
En Parés Baltà creemos que sólo a través de una meticulosa observación de la naturaleza podremos darnos cuenta de sus necesidades para acompañarla y ayudarla a expresarse libremente y dar el mejor fruto posible.
Para conseguir la mayor vitalidad de nuestras cepas usamos los Preparados Biodinámicos y el Compost, trabajamos con Cubiertas Vegetales, fomentando la biodiversidad, integramos Animales en las labores del campo, y Abejas que nos ayudan a polinizar las flores y a crear un mundo más sostenible.
Los preparados biodinámicos en la viticultura
Preparados de las siete plantas sanadoras para el compost
Preparación de Milenrama (Preparado 502)
Actúa en los procesos del azufre y potasio que aporta el desarrollo del crecimiento del cultivo.
Preparación de Manzanilla (Preparado 503)
Regula los procesos del nitrógeno en el compost
Preparación de Ortiga
(Preparado 504)
Actúa en los procesos del hierro y aporta desarrollo al crecimiento del cultivo.
Preparación de Corteza de Roble (Preparado 505)
Actúa en los procesos del calcio atenuando las enfermedades de las plantas vinculadas con fenómenos de proliferación o exuberancia.
Preparación de Diente de León (Preparado 506)
Refuerza los procesos de sílice y ayuda al mantenimiento de la verticalidad, aumentando la formación radicular.
Preparación de Valeriana
(Preparado 507)
Fomenta la movilidad de los procesos del fósforo en el compost. El preparado de valeriana 507 es esencial, aporta calor al entorno a las pilas de compostaje.
Preparación de cola de caballo (conocido como 508)
Ayuda a prevenir enfermedades fúngicas y equilibra el elemento agua en plantas y suelo.
“Steiner quería llevar el equilibrio del bosque a los cultivos. Crear micro ecosistemas enlazados con el entorno, donde las plantas, los animales y los árboles son los verdaderos protagonistas, creando relaciones bidireccionales vitales para incrementar la biodiversidad y alcanzar el equilibrio en un espacio donde el hombre sólo actúa como director de orquestra de la Unidad Granja, sin alterar ni forzar producciones.”
Observar, pensar, sentir y actuar. Marta Casas, enóloga
Preparados esenciales en la viticultura biodinámica
“Es indispensable que el viticultor sea conocedor de la filosofía de la biodinámica y de antroposofía, la ciencia que lo abraza, para integrar estos conocimientos tanto en el campo como en la vida. Para nosotros es básico primero observar aquello que puedes aplicar, pensarlo bien sentirlo como tuyo y creerte capaz de hacerlo y finalmente, actuar. La biodinámica no es el fin sino el medio para conseguir un vino equilibrado y vivo, que cuando la persona se lo tome pueda percibir que hay sensibilidad hacia todo lo que lo envuelve. No debemos focalizarnos en un objetivo material, no se debe esperar ningún resultado concreto, sino que se debe sentir que aquello es bueno para tu finca, para ti y sobre todo para las personas que tomaran tu vino”
Marta Casas, enóloga
Preparado de estiércol en cuerno de vaca (Preparado 500)
Fortalece la vida del suelo y la relación entre suelo y plantas, está hecho del estiércol de vaca enterrado dentro del cuerno de una vaca durante los meses de invierno. Se aplica sobre la tierra esparciéndolo con un salpicado de gota gorda al comienzo del proceso vegetativo de la planta y en otoño.
Preparado de sílice en cuerno de vaca (Preparado 501)
Incrementa la inmunidad de la planta, fortaleciendo la fotosíntesis y mejorando la maduración. Está preparado de cristales de cuarzo pulverizados que son enterrados en un cuerno de vaca durante los meses de verano. Se aplica en aspersión como una fina niebla sobre las plantas verdes cuando empiezan a formar sus fructificaciones.
El preparado de Maria Thun
Esta mezcla de estiércol de vaca, basalto y cascara de huevo, aumenta la fertilidad del suelo y contrarresta las impurezas en el suelo, ya que es un activador microbiológico de los estiércoles para su posterior compostaje. Como el preparado 500 y 501, el Maria Thun también se aplica con dilución homeopática de agua.
Los requisitos de la Normativa Demeter son más elevados de lo que se exige a los productos ecológicos, son unos requisitos muy especiales que fortalecen los procesos vitales de la tierra y de los alimentos. Los agricultores Demeter contribuyen activamente a crear un futuro digno, ofreciendo alimentos saludables con sabores distintivos y con carácter.
La importancia del compost: devolver a la tierra lo que es de la tierra
El suelo en el que viven nuestros viñedos es quizás el factor más importante a la hora de elaborar un vino. El suelo es el hábitat y fuente de nutrición de las cepas: la calidad de la uva, y posteriormente del vino, está condicionada por él, ya que éste determinará no sólo su calidad, sino también su aroma y viveza innata.
Por eso, el cuidado del suelo es de suma importancia para cualquier tipo de cultivo.
Además del uso de las cubiertas vegetales que aportan vida al suelo y nos ayudan a evitar su degradación, en Parés Baltà usamos compost orgánico para nutrirlo y fortalecerlo.
Este abono natural procede de residuos animales y vegetales y a pesar de que tienen una menor riqueza mineral, son de mayor calidad. El objetivo del uso del compost es mejorar las propiedades físicas, químicas y biológicas del suelo, factores determinantes en la calidad de la uva.
Entre sus beneficios destacan el aporte de nutrientes y micronutrientes, reducción de la erosión, aumento de la capacidad de retención de los minerales y la humedad, incremento de la porosidad del suelo y por supuesto, el desarrollo de la actividad microbiana de los suelos, con lo que se aumenta la disponibilidad de nutrientes en formas asimilables para los cultivos y la capacidad de intercambio catiónico.
En conclusión, la agricultura biodinámica además de aportar vitalidad a la tierra, aporta vitalidad a la planta y, lo más importante, al fruto que nos da, que más tarde consumiremos y que se convertirá en nuestra fuente de vida.
«Comer y beber sano no es únicamente beneficioso para nosotros como seres vivos, sino también para el planeta.
La tierra es un reflejo de la humanidad o viceversa.»
La importancia de las cubiertas vegetales en los viñedos ecológicos y biodinámicos
Las cubiertas vegetales están llenas de vida, vida en forma de pequeños insectos que nos ayudan a prevenir de forma natural plagas que podrían afectar al viñedo. Un ejemplo muy claro son las mariquitas. Estos pequeños y simpáticos insectos se alimentan de pulgones, por lo que resultan enormemente beneficiosas para la agricultura, ya que controlan las plagas en los viñedos de forma totalmente natural.
Así pues, uno de los objetivos para el uso de cubiertas vegetales en el viñedo, ya sean espontaneas o sembradas, es tener un suelo vivo, donde la flora y fauna autóctona conviva en armonía con el viñedo.
Las cubiertas vegetales, además de ayudarnos a mantener un ecosistema equilibrado, lleno de biodiversidad:
- Aumentan la captación de CO2.
- Mejoran la estructura del suelo.
- Facilitan que la lluvia penetre más fácilmente en el suelo, aumentando su capacidad de almacenamiento de agua – un factor muy importante a tener en cuenta ya que en Parés Baltà no irrigamos nuestros viñedos.
- Evitan la erosión y degradación del suelo.